El planeta está en una situación crítica debido al maltrato que recibe por parte del ser humano
Inés, Júlia, Alfonso, Lucía y Alizeé.
La degradación del medioambiente es un problema que afecta a nuestro planeta de una forma directa e inmediata. Los ecosistemas se están degradando de tal forma que están perdiendo su capacidad de regeneración a causa de los maltratos recibidos por nuestra mano; los biólogos nos alertan de que estamos entrando en el punto de no retorno.
El planeta se encuentra en una situación crítica, “si tuviéramos que evaluar los daños actuales, del 1 al 10, diríamos que está en un 8”, así lo explica la bióloga Anna Traveset. Ninguna parte del planeta se encuentra totalmente intacta, la gran mayoría han sido marcadas por la mano humana. Con programas de restauración y eliminación de cualquier tipo de vertidos muy eficientes podríamos llegar a recuperar parte de las aguas contaminadas y la fauna que ha ido desapareciendo. Aunque sería un proceso de muchos años de duración. Aunque hay bosques o terrenos que ya son irrecuperables, como las plantaciones de palmeras usadas para la extracción de aceite de palma, o los incendios de Australia, que ya han provocado daños irreparables.
Debido a las actividades humanas, el aumento de la emisión de los gases de efecto invernadero ha incrementado la temperatura del planeta, provocando el deshielo. Como consecuencia hace que aumente el nivel del mar. Llegará un momento en el que la vuelta atrás será imposible; los ecosistemas tienen una capacidad de regeneración limitada, y esta, está en su límite.
Los animales también juegan un papel fundamental en el planeta, y la extinción de algunos de ellos podría tener unas consecuencias considerables; el ecosistema podría sufrir debido a la falta de uno de los factores que lo constituyen.
"No se pueden cometer los mismos errores que en las generaciones anteriores descuidando el planeta"
“Es fundamental que en las escuelas ya los profesores hagan un fuerte trabajo de concienciación, no se pueden cometer los mismos errores que hemos cometido las generaciones anteriores descuidando el planeta”, afirma Anna Traveset.
Aun así, planteamos unas soluciones que podrían, si no acabar con el cambio climático, al menos frenarlo durante unos años:
- Frenar la destrucción del patrimonio natural
- Dejar de abusar de la pesca y/o caza
- Control de especies invasoras
- Reducción de emisión de gases de efecto invernadero
- Proporcionar más educación ambiental
En conclusión, el cambio climático no es un problema que vaya a desaparecer si se ignora, debemos concienciar a la población y empezar a movernos para conseguir que nuestro planeta nos dure por lo menos para varias generaciones posteriores. Porque no hablamos de nuestro futuro, hablamos del de nuestros hijos.